5 tips de Chilly sobre trajes de baño y salud íntima en verano
Con la llegada de verano volvemos a sacar los trajes de baño. Cuando empiezan a subir las temperaturas los bikinis y bañadores se convierten en básicos imprescindibles.
Sin embargo, se trata de prendas muy delicadas, que sufren muchas agresiones al estar expuestas al sol, a la sal, al sudor, a la arena, al cloro o a los protectores solares y que, a su vez, están en contacto directo con la zona íntima. Por ello, es necesario lavarlas de manera muy cuidadosa, de modo que no afecten a la salud íntima.
Según Belén Gómez, ginecóloga del Hospital Infanta Leonor y colaboradora habitual de Chilly, la forma en la que se lavan los trajes de baño puede causar alteraciones en la vagina, porque “la vagina no está protegida por piel, salvo la parte externa de los genitales (los labios mayores y menores) ya que es una mucosa. Las mucosas están mucho más expuestas y son más vulnerables a las infecciones que la piel, por eso es necesario mantener el ecosistema vaginal evitando condiciones favorables para el crecimiento de gérmenes exógenos” afirma la ginecóloga.
Errores que se comenten al lavar los bikinis:
1. Sacudir el bikini una vez que esté seco y volverlo a usar → NO. Ya que los restos de arena, sal y químicos podrían ocasionar infecciones en la zona íntima, además de irritación o rozaduras.
2. Meterlos en la lavadora → NO. Para lavarlos hay que seguir un proceso minucioso, puesto que las telas con las que se fabrican los bañadores y bikinis no pueden entrar en contacto con agua caliente, ya que perderían su elasticidad. Hay que lavarlos sin mezclar con otras prendas, a mano, con agua fría y un jabón específico para tejidos delicados.
3. Añadir suavizantes → NO. Este tipo de productos suele llevar perfumes que pueden ser irritantes en la zona íntima y agresivos en la tela del bañador.
4. Usar la secadora → NO. Al igual que la lavadora, la secadora puede deformar y dañar los bikinis. Lo ideal es escurrirlos con la mano lo máximo posible y dejarlos secar en un lugar con buena ventilación y a la sombra, ya que exponerlos al sol puede hacer que pierdan el color.
5. Guardar o utilizar los bikinis húmedos → NO. Tanto en la playa como en la piscina, como si has lavado el bikini en casa y quieres volver a usarlo, hay que asegurarse de que está completamente seco, ya que la humedad de los bañadores mojados favorece el crecimiento bacteriano.
Por último, además de ser metódicas con el lavado los trajes de baño, en verano también hay que tener un cuidado especial con la higiene íntima diaria y usar productos específicos como los que nos ofrece Chilly, para mantener un pH equilibrado y prevenir molestias, más frecuentes en esta época del año.
No hay que usar un gel de ducha normal, porque según la ginecóloga Belén Gómez, “pueden agredir el ecosistema vaginal. En cambio, un gel de higiene íntima específico tiene un pH más ácido (el pH de la zona íntima está entre 3.5 y 5), agentes limpiadores más suaves y además está testado bajo control ginecológico.”
Debido a las altas temperaturas de la época estival, Chilly Fresh es el producto más adecuado. Disponible en versión normal, versión mini y toallitas, está enriquecido con Mentol Natural, que proporciona una agradable sensación de frescor duradero. Además, está potenciado con una molécula Anti-Odor, que neutraliza y reduce la formación de malos olores gracias a la acción antibacteriana. Y tiene pH5, que respeta la fisiología natural de las mucosas genitales.
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