La Ley de prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentario, que se votará mañana en el pleno del Congreso de los Diputados, representa un hito a nivel nacional al abordar el gran reto que supone el desperdicio de alimentos en España. Actualmente, se tiran más de 7,7 millones de toneladas de comida cada año en todo el país, lo que equivale a cerca de 250 kilogramos por segundo. Con esta iniciativa legislativa, se refleja un compromiso de país para enfrentar esta realidad, posicionando a España como el tercero de la Unión Europea en legislar sobre este tema. Además, marca el camino a seguir para todos los actores de la cadena de valor alimentaria y para los consumidores, visibilizando un problema que, hoy en día, genera el 10% de las emisiones globales de CO2 a nivel mundial.
Victoria Albiñana, responsable de Relaciones Institucionales y Asuntos Públicos de Too Good To Go en España señala:
“Tras varios meses de parón en la tramitación de esta ley, la votación que tendrá lugar en el pleno del Congreso de los Diputados supone un paso al frente que esperemos se traduzca en la aprobación de una ley que es muy positiva y que veníamos demandando desde Too Good To Go desde que comenzamos a actuar contra el desperdicio de alimentos en España.
De las conclusiones que podemos sacar de la votación que tuvo lugar el pasado 12 de diciembre en la Comisión de Agricultura, Pesca y Alimentación, parece que el texto podría traer consigo algunos cambios como por ejemplo la priorización de la prevención, la inclusión de la redistribución junto con la donación en distintos artículos de la ley o la prohibición de la destrucción de excedentes alimentarios. Tres cambios relevantes que ayudarán a reducir el desperdicio de comida y que representan un gran avance hacia un modelo más sostenible.
- Priorizar la prevención es algo en lo que hemos insistido en Too Good To Go desde el inicio. El mejor residuo es aquel que no se genera por ello es fundamental actuar con el fin de reducir en lo posible los excedentes alimentarios.
- Por otra parte, incluyendo referencias a la redistribución junto a la donación en diferentes apartados de la ley permitiría dotar a las empresas con más opciones y flexibilidad para combatir el desperdicio alimentario.
- Además, la prohibición de la destrucción de excedentes alimentarios supone una novedad muy relevante en línea con lo que se prevé en otros países como Francia.
Sin embargo, estas son solo tres de las muchas enmiendas que se incorporaron al texto en la Comisión de Agricultura, Pesca y Alimentación (y cuyo texto aún no se ha publicado en la web del Congreso), quedando aún pendiente su tramitación en el Pleno para conocer la versión final que irá al Senado.