La revista científica internacional Journal of the American College of Nutrition acaba de publicar la investigación ‘Baja adherencia a las guías alimentarias en España, especialmente en población con sobrepeso u obesidad: estudio científico ANIBES’. Esta nueva investigación se ha centrado en el análisis de manera efectiva de la ingesta de alimentos en la población española teniendo en cuenta su estado ponderal y la distribución de la grasa corporal.
Se trata de un nuevo trabajo que incluye resultados inéditos dentro de este estudio científico sobre datos antropométricos, ingesta de macronutrientes y micronutrientes y sus fuentes, así como el nivel de actividad física y datos socioeconómicos de la población, que ha sido coordinado por la Fundación Española de Nutrición (FEN).
“Este trabajo pone en evidencia que existe una elevada proporción de población española que no sigue las recomendaciones incluidas en las actuales guías alimentarias, sobre todo en lo que se refiere al consumo de fruta, verduras y hortalizas, cereales y leche y productos lácteos, que es inferior al aconsejado”, apunta la Prof. Dra. Rosa Mª Ortega, Directora del Grupo de Investigación VALORNUT y Catedrática de Nutrición de la Universidad Complutense de Madrid e investigadora principal de este trabajo. “A la vez, también se ha podido ver que el consumo de carne y derivados es mayor del que indican las recomendaciones”.
Tomando como referencia los parámetros incluidos en las guías, “el 94,6% de la población que ha participado en el estudio científico ANIBES no consume las cinco raciones diarias recomendadas de frutas y verduras”, explica la Prof. Dra. Rosa Mª Ortega. “A esto hay que sumar que el 84,2% ingiere menos de las cuatro raciones recomendadas de cereales y el 66,4% consume menos de dos raciones diarias de productos lácteos”.
Por otro lado, “el 59% de la población ingiere más de una ración de carne y derivados al día, lo que contrasta a su vez con que el 60% no llegue a consumir media ración al día de huevos o de pescado”, explica el autor del estudio.
Adherencia en personas con sobrepeso u obesidad
Teniendo en cuenta las diferencias de hábitos alimentarios basados en la distribución de la grasa corporal, “los hombres con un mayor riesgo (relación circunferencia cintura/altura ≥ 0,5) tenían un consumo por debajo de las recomendaciones de carne, huevos y pescado, pero tenían una ingesta de frutas, verduras y cereales mayor que la población masculina sin riesgo (relación circunferencia cintura/altura < 0,5)”, explica la investigadora principal de estudio. “En lo que se refiere a la población femenina con una relación circunferencia cintura/altura mayor o igual a 0,5, tenían una ingesta de huevos y frutas por debajo de aquellas mujeres con una relación circunferencia cintura/altura menor a 0,5, pero un mayor consumo de cereales integrales que éstas”.
Teniendo en cuenta las diferencias de hábitos alimentarios basados en la distribución de la grasa corporal, “los hombres con un mayor riesgo (relación circunferencia cintura/altura ≥ 0,5) tenían un consumo por debajo de las recomendaciones de carne, huevos y pescado, pero tenían una ingesta de frutas, verduras y cereales mayor que la población masculina sin riesgo (relación circunferencia cintura/altura < 0,5)”, explica la investigadora principal de estudio. “En lo que se refiere a la población femenina con una relación circunferencia cintura/altura mayor o igual a 0,5, tenían una ingesta de huevos y frutas por debajo de aquellas mujeres con una relación circunferencia cintura/altura menor a 0,5, pero un mayor consumo de cereales integrales que éstas”.
Por su parte, si se toma como referencia el Índice de Masa Corporal (IMC) “las mujeres con sobrepeso y obesidad, así como con adiposidad abdominal que han participado en el estudio tenían un consumo menor de alimentos altos en grasas y azúcares simples, típicamente restringidos en los programas de control de peso”, incide la Prof. Dra. Rosa Mª Ortega. “Este resultado indica que la población con un peor estatus de peso, y que normalmente están más preocupados por esta situación, consumen una mayor cantidad de alimentos que consideran apropiados para el control de su peso”.
Además, “la población femenina con obesidad tiene una mayor ingesta de pescado, fruta o legumbres y toman menos cereales de desayuno y lácteos”, concluye la investigadora. “También se ha podido comprobar que tanto las mujeres con sobrepeso como aquellas con obesidad consumen una menor cantidad de alimentos ricos en azúcar y mayor proporción de refrescos sin azúcar que aquellas con menor peso, y las que presentan obesidad abdominal toman menos cereales y alimentos ricos en azúcar, pero mayores cantidades de frutas, vegetales y bebidas no alcohólicas que las mujeres sin obesidad abdominal”.
En lo que se refiere a la población masculina, este estudio ha comprobado que “aquellos con sobrepeso u obesidad y adiposidad abdominal tenían un consumo de cereales, así como de frutas y verduras, muy inferior respecto a las de las recomendaciones propuestas por las guías alimentarias”.